Un golazo del argentino Eduardo Salvio dio al Atlético de Madrid una sufrida victoria en la ida de los cuartos de final ante el Hannover (2-1) cuando el 1-1 parecía inamovible, en un duelo que se complicó el equipo rojiblanco con un fallo defensivo y que cerró con una ventaja mínima para la vuelta en Alemania.
Su disparo a la escuadra en el minuto 89 salvó al conjunto madrileño de un resultado desastroso, tras un partido insulso del Atlético, en un 'bache' ya evidente de juego, pero resolutivo en la competición continental, en la que ya acumula ocho triunfos seguidos y en la que defenderá un 2-1 en busca del billete a semifinales.
El Atlético abrió rápidamente el marcador, a los nueve minutos, por medio del colombiano Radamel Falcao. Un cabezazo a saque de falta de Gabi le bastó para batir a Zieler, precipitado quizá en su salida y castigado con el 1-0. Fue el séptimo gol del atacante en esta edición de la Liga Europa, el vigésimo sexto de la temporada para el ariete y el 400 del Atlético en competición UEFA.
El conjunto rojiblanco salió con fuerza, consciente de que el orden de los partidos, con la vuelta en la ciudad alemana, no le daba margen de error en el primer envite en el Vicente Calderón, un duelo que comenzó con alta intensidad, buenas jugadas de ataque y contundencia defensiva contra un oponente con más ganas que juego.
El Hannover, un bloque que se presentaba en Madrid y en los cuartos de final con su potencia y velocidad como argumentos, se sintió inferior al Atlético desde la previa y confirmó sus sensaciones en la primera media hora... hasta que revivió en su primera ocasión, en un fallo defensivo local que significó el 1-1.
Lanzó el uruguayo Diego Godín un pase desviado hacia Falcao en el ataque, se durmió en el repliegue el brasileño Filipe Luis, cinco metros por delante de su marcaje en la banda derecha, Lars Stindl, que recibió solo y envió un pase raso al centro del área que superó a Miranda y que enganchó de primeras Mame Diouf ante Courtois.
Era el minuto 38. Y el tanto en contra multiplicó las urgencias del Atlético, con algunas oportunidades antes del empate, como otro remate de Falcao, un disparo cruzado de Adrián o un cabezazo de Mario Suárez, y con necesidad de goles para mantener su condición de favorito para la visita de la próxima semana a Hannover.
Tenía un tiempo completo por delante, pero ya había otro partido sobre el terreno de juego. El Atlético jugaba nervioso, incómodo, sin vías hacia la portería contraria; el Hannover reforzó sus precauciones defensivas y jugó con el reloj. En los 15 primeros minutos del segundo tiempo hubo más interrupciones que fútbol.
Fue entonces cuando el argentino Diego Simeone dio entrada al brasileño Diego. Recuperado hace una semana de una rotura fibrilar, con unos minutos el pasado domingo en Zaragoza y hoy con media hora para dar otro aire a un choque con mala pinta para el Atlético, en el que Courtois salvó el 1-2 con reflejos ante el peligroso Diouf.
El Atlético tampoco encontró el camino con el media punta sobre el césped, pero en los instantes finales, cuando todo parecía destinado a un triste 1-1, un golazo de Salvio le dio un triunfo revitalizante y necesario para el encuentro de vuelta en Hannover. Incluso, Diego, de chilena, tuvo el 3-1, pero lo detuvo Zieler.
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